Según la última encuesta de Uber, el 52% de los españoles recurre al delivery tras una jornada agotadora, y un 38,5% prefiere pedir la cena en casa antes que salir de fiesta.
Con el invierno a las puertas y las primeras luces de Navidad apareciendo en las calles, los planes caseros se convierten en grandes protagonistas durante la temporada. Cuando bajan las temperaturas y la lluvia invita a quedarse en casa, muchos españoles encuentran en el delivery un refugio emocional y placentero capaz de adaptarse a cualquier estado de ánimo: un gesto sencillo que reconforta y convierte una noche cualquiera en un momento especial.
En este sentido, Uber Eats revela cómo pedir comida a domicilio se ha transformado en mucho más que una solución práctica, analizando cómo se ha convertido en un gesto cotidiano que impacta directamente en el estado de ánimo de los españoles. Según la ‘Encuesta 2025 sobre hábitos de consumo y movilidad en España’, realizada por Uber, más de un tercio de los españoles se siente más feliz los días en los que sabe que va a pedir comida a domicilio (35%).
La relación entre el delivery y las emociones es clara: según la encuesta, un 23% de los encuestados afirma que pedir comida a domicilio les hace sentir felices cuando atraviesan un día triste, mientras que un 52% recurre a este servicio tras una jornada agotadora, cuando no tienen energía para cocinar. Además, un 43% lo considera la mejor solución cuando recibe visitas de amigos o familiares en casa, confirmando que pedir comida a domicilio también se asocia a momentos de disfrute y conexión social.
Aliados gastronómicos para días de bajón
Para muchos españoles pedir comida a domicilio se ha convertido en una forma de disfrute cotidiano: más de un tercio prefiere invertir en una buena comida a domicilio en casa antes que salir de fiesta (38,5%). Además, el 37% afirma que disfruta más de su plato favorito desde el sofá que en un restaurante; un 31% prefiere pedir a domicilio que reservar en un restaurante; y más de un 14% reconoce que incluso cuando viaja recurre al delivery, especialmente si está cansado.
Las elecciones gastronómicas tampoco son casuales. En los días de bajón, los españoles tienden a buscar platos reconfortantes: la comida americana, con hamburguesas a la cabeza, es la favorita para levantar el ánimo de los encuestados (32%), seguida de la italiana (27,5%). Los sabores mexicanos (11%) completan el podio de los platos que mejor acompañan en momentos de bajón emocional.
Tendencias regionales
Aunque los patrones son similares en toda España, cada región tiene su propio “matiz emocional” y gastronómico. Según la encuesta de Uber, la Comunidad de Madrid, un 62% pide delivery tras un día de bajón y cerca de un 49,5% lo hace cuando tiene visitas. En la Comunidad Valenciana, los datos son similares (51,5% y 47,5%, respectivamente), reforzando la idea del delivery como comodidad y disfrute compartido. En Cataluña, el cansancio (49,5%) y la falta de tiempo (32,5%) son las principales razones, mientras que en Andalucía el 48% pide tras una jornada larga y más del 41% cuando recibe amigos o familiares.
Entre las regiones del norte, Galicia lidera en pedidos por cansancio (55%) y también presenta un alto peso de las visitas (47,5%). En Asturias y el País Vasco, el pedido responde sobre todo al agotamiento (52,5% y 55,5%, respectivamente), aunque los vascos destacan por hacerlo más en solitario. En Cantabria, en cambio, ocurre lo contrario: el 50% pide cuando tiene visitas y más el 31% por cansancio.
En el centro, Castilla-La Mancha (52% y 46%) y Castilla y León (44,5% y 40,5%) mantienen un equilibrio entre cansancio y momentos sociales, mientras que Aragón y Extremadura presentan porcentajes muy similares. En el sureste, Murcia combina ambas motivaciones a partes casi iguales (54,5% y 50%).
En las islas, los datos reflejan un patrón de relax y desconexión: en Canarias, el 51,5% pide tras un día agotador y el 45,5% cuando hay visitas, mientras que, en Baleares, aunque con muestra reducida, esas cifras suben al 75% y 50%, respectivamente.
Por último, en comunidades con menor tamaño muestral, como Navarra, La Rioja, Ceuta y Melilla, los resultados se mantienen en línea con la media nacional, con pedidos asociados tanto al cansancio como a los encuentros con amigos o familiares.
En estas zonas, la mayoría pide como mucho una vez por semana y, cuando buscan un extra de ánimo, se decantan sobre todo por hamburguesas y pizzas, en línea con las preferencias más repetidas en las comunidades autónomas analizadas.
“En esta época del año, cuidar de uno mismo también pasa por disfrutar de los pequeños placeres del hogar. Pedir nuestro plato favorito puede convertirse en un ritual de autocuidado, en un regalo para uno mismo o un capricho que reconforta en los días fríos. En Uber Eats queremos ser parte de esos momentos que suman a la felicidad cotidiana”, concluye Marta López Saavedra, directora de Retail de Uber Eats en España.
