La empresa madrileña especializada en productos ibéricos con Denominación de Origen fortalece su posicionamiento en retail, eventos y ecommerce gracias a una propuesta basada en la calidad, el origen y la cercanía.
Desde su creación, Sabor Ibérico se ha consolidado como una de las empresas emergentes más sólidas en el sector gourmet español. Su crecimiento sostenido en los últimos ejercicios responde a un modelo basado en el respeto al producto, la artesanía como valor diferencial y la atención personalizada al cliente. Con presencia en tienda física, canal online y eventos de alta calidad, la firma apunta a un futuro de expansión sin perder su esencia de proximidad y excelencia.
Del origen a la mesa: un modelo basado en el producto real
Fundada en 2021, Sabor Ibérico ha construido su identidad sobre un principio firme: la calidad no admite atajos. Su catálogo incluye jamones 100% ibéricos de bellota, quesos artesanos con Denominación de Origen, embutidos curados y mermeladas naturales sin aditivos, procedentes de productores nacionales que trabajan con métodos tradicionales y controlan todo el proceso, desde la materia prima hasta el etiquetado final.
Este modelo de selección directa —basado en alianzas con pequeñas casas como Dehesa de Solana (Extremadura), Ojos del Guadiana (Daimiel) o Can Company (Mallorca)— ha sido clave para diferenciar a la empresa frente a otros actores del sector. El origen importa, y si el producto tiene alma, el cliente lo nota.
Además de su tienda física en la calle Narváez de Madrid, que funciona como escaparate sensorial de su universo gastronómico, Sabor Ibérico opera una tienda online con distribución nacional y servicios a medida para particulares y empresas.
Crecimiento sostenible impulsado por diversificación y excelencia operativa
El último ejercicio ha supuesto un importante salto cualitativo para Sabor Ibérico. La empresa ha experimentado un crecimiento interanual destacado, impulsado por tres líneas estratégicas: ecommerce, tienda física y eventos. Solo en el último año, ha atendido un volumen elevado de pedidos a través de su canal online, cubriendo numerosos eventos de gran formato —tanto corporativos como privados— y ampliado su cartera de clientes B2B con soluciones gourmet personalizadas para empresas, tanto en servicios de a la carta en sus instalaciones como regalos o cestas a medida.
Su modelo de eventos se ha consolidado como un valor diferencial. Desde catering integral hasta corners de jamón cortado en vivo o mesas de quesos artesanales, la compañía ofrece experiencias gastronómicas de alto nivel en bodas, comuniones, celebraciones privadas y ferias profesionales. Esta versatilidad le ha permitido adaptarse a las nuevas demandas del consumidor sin renunciar a su estándar de calidad.
Además, Sabor Ibérico ha iniciado nuevas líneas de negocio como el servicio de foodtruck gourmet, y su participación como proveedor oficial en festivales culturales y musicales, donde combina visibilidad de marca con activación directa en puntos de consumo, aunando su oferta gastronómica al más puro street style, junto con la producción del catering de las zonas VIP y la atención en el backstage, tanto a los artistas como a sus equipos.
Visión de futuro: expansión sin perder la proximidad
De cara a los próximos ejercicios, la hoja de ruta de la empresa pasa por consolidar su crecimiento sin perder su identidad de proximidad, sostenibilidad y rigor. El objetivo es reforzar su presencia en eventos estratégicos, ampliar acuerdos con nuevos distribuidores y marcas colaboradoras, y explorar fórmulas innovadoras de comercialización, todo ello sin desvincularse de sus raíces artesanas.
La estructura actual combina un equipo estable en tienda, logística y cocina, con una red nacional de proveedores y colaboradores locales que garantiza frescura, trazabilidad y agilidad en la operación. Esta base ha sido clave para poder crecer de forma orgánica y mantener la confianza de sus clientes particulares y corporativos.
Así, Sabor Ibérico apuesta por mantenerse fiel a su esencia: ofrecer solo lo que está a la altura de ser recordado.